domingo, 15 de noviembre de 2009

El juego de la felicidad.

Un ojo al gato…
Presenta:
El juego de la felicidad.
Cuando estés triste o aburrido, el juego de la felicidad te hará sentir mejor, simplemente piensa en las cosas sencillas de la vida que te hacen feliz, aquellas que no cuestan casi nada y aportan mucho a tener un buen día, inténtalo! Es divertido!. Pd. No es necesario ordenar la lista de manera prioritaria.

1.-Despertar un sábado en la mañana con un cielo brillante y azul (sabiendo que tienes el día libre).
2.-Jugo de naranja recién exprimido (o una naranja dulce)
3.-Acariciar a mi perro, que mueve la cola como loco.
4.-Poner los pies descalzos sobre la duela de madera tibiecita de un escenario o un salón de ballet.
5.-La luz del sol en invierno.
6.-Mis colores de madera o crayolas con la punta recién sacada.
7.-Una llamada o mensaje cariñoso de un amigo.
8.-Una reunión familiar en domingo.
9.-Organizar una acampada con mis cuates.
10.-Ir sin preocupaciones por la carretera con música a todo volumen en compañía de los amigos o primos.
11.-Ver una película en la comodidad de mi sala con una manta y un té.
12.-Ir a una expo de pintura-foto u obra de teatro.
13.-Escribir en la primera página de un cuaderno nuevo.
14.-Comer/cenar Tacos.
15.-Una gran rebanada de pastel!!
16.-No cocinar un día y pedir pizza.
17.-Leer un libro nuevo, o releer uno que me haya encantado.
18.-Escuchar una de esas rolas que te enchinan la piel.
19.-llegar a casa por la noche y cotorrear con mi mejor amiga.
20.- Aprender.

¡Ahora inténtalo tú! Si quieres enviarme tu lista de la felicidad: lolita_ninful@hotmail.com

1.-
2.-
3.-
4.-
5.-
6.-
7.-
8.-
9.-
10.-
11.-
12.-
13.-
14.-
15.-
16.-
17.-
18.-
19.-
20.-

jueves, 12 de noviembre de 2009

Domingo miseria

Un ojo al gato…


Domingo Miseria.

Por Christian Sandoval.

Hoy, es uno de esos días en los que no quiero escribir pa ni madres, mi creatividad está al mínimo y mi sueño es un resto, dormí bien… no estoy, ni siquiera, medianamente cruda, simplemente es una de esas ocasiones en las que preferiría estar haciendo cualquier otra cosa que no sea escribir, tener ideas y ponerlas en orden… a veces puede llegar a ser una hueva.

¿Cómo trabajan los escritores? ¿Qué les da valor? ¿De dónde sacan las jaladas que luego le cuentan a los demás? ¡mñeee! Juan Trigos dice que el papel aguanta lo que le pongan, cualquier cosa puede ser escrita, las reflexiones más elevadas o las más atroces obscenidades, los pensamientos más mediocres ¿Qué rayos es esto de plantear cosas intangibles a través de signos cuyo significado puede penetrar en la mente humana y conmoverle? (o asquearle), como diría mi cuate “el nene” ¡Ah, la madre!

Ignoro por completo si soy escritora, o si puedo llegar a serlo, tengo cuentos, poemas (increíblemente malos), columnas, ensayos y tres novelas empezadas, lo único que comprendo ahora, es que amo perder el trasero frente a una máquina todo el día, inventando idioteces, incluso puedo escribir algún artículo con ayuda de una información documentada y datos obtenidos de investigación de campo… pero eso de la reporteada permanente no más no se me da, sin embargo por ahí dicen que el medio más chido para acercarse a la literatura es el periodismo.

Charles Bukowski, soñaba con llegar a ser reportero, pero nadie lo contrataba por que no tenía carrera, los cuentos que escribía, las revistas se los regresaban con miles de disculpas y frases de ánimo como, “siga intentándolo” llegó a vivir de una barra de caramelo al día con tal de tener suficiente tiempo para escribir y seguirse emborrachando… también había temporadas en las que no escribía, sólo se emborrachaba, no le interesaba trabajar, sólo vivir.

De pronto se hizo increíblemente rico, mi teoría es que sus novelas triunfaron gracias a su sinceridad, no pretendía ser un héroe, nada más se dedicó a narrar las aventuras de un perdedor (él) al que casi todas las mujeres rechazaban, que limpiaba sus calzones con periódicos húmedos y que cuando quiso robar para comer (un pepino) ni siquiera pudo hacerlo.

Otros escritores tienen métodos más sanos y sistemáticos, como Gabriel García Márquez, quien tiene un horario definido para trabajar y no puede escribir sin tener tres o cuatro diccionarios a su lado, también están aquellos que las palabras les salen de manera tan natural, como si de un pedo se tratara (mi vida, José Agustín) porque ya desde su más tierna juventú aprendieron la mecánica del escrituraje, ya que llevaban un diario de quinceañera.

Ya llevaba mi diario de quinceañera, todavía escribo de vez en cuando en uno, pero nunca he llegado a llenar una libreta, lo de la sinceridad aquí esta: No tengo ni la más mínima idea de si soy escritora o pueda llegar a serlo… no tengo esperanzas de llegar a serlo, es más, no tengo esperanzas de nada, y este hecho me tiene sin cuidado, es tarde, debo sacar de mi mente a una incomprensible criaturita con cabello profusamente rizado y ocupar el resto de la tarde en hallar la manera de evadir (al menos un día más) una vida coherente.

Listo.

Ahora me falta la disciplina…

Comentarios: lolita_ninful@hotmail.com

domingo, 1 de noviembre de 2009

Dia de muertos

UN OJO AL GATO…


Presenta:

DÍA DE MUERTOS.

Por Christian Sandoval Hernández.



“Estoy interesado en la vida misma, no en sus puntas.”

-Miguelito, en historieta “Mafalda” de Quino-



Felicidades a los muertos que pululan por la ciudad, por el país, bueno, hasta por el mundo, un abrazo a todos… ¡tan muertos ellos! renunciaron a sus sueños por asegurar un poquito de pan para su familia, un poquito de fruta cálida para los niños, los zapatos, el pollo, los frijoles, a quienes no han tenido más remedio que zombificarse, perder la personalidad en esta maraña de necesidades sin fin que es la realidad. Alguna vez, en la infancia, deseamos ser paleontólogos, veterinarios, actrices, bailarinas, cantantes, astronautas, médicos; poco a poco esos anhelos fueron tomando forma sobre la misma base o enfocándose a otras vertientes, aún así, los seres humanos, (quien sabe por qué) siempre tenemos el deseo de llegar a ser alguien.

Como decía la madre Teresa de Calcuta (¡yo citándola!) “no hay peor enfermedad que no ser nada para nadie”, el sentido de importancia de un ser humano, o la falta de él, puede generar, desde la niñez, ansiedad y frustración, ahora, favor de imaginarse como esta el nivel de realización personal, el sentido de la importancia y el de la pertenencia en México, un lugar donde muchos niños tienen que dejar la escuela para ponerse a chambear, las posibilidades de empleo son pocas (el gobierno ofrece a los más necesitados plazas temporales como albañiles constructores de ejes viales, mientras otros puestos, remunerados y estables, son para sus amigos o familiares) tampoco hay espacio para los profesionistas, de hecho, muchas carreras, a penas tienen sentido en el ombligo del mundo.

Hace unos días, platicaba con unos amigos en la sala de una casa, cuya renta no hemos terminado de pagar, estábamos sumamente agüitados ante la casi patente imposibilidad de tener mucho dinero, formar una banda y hacer una obra de arte, respectivamente, entonces, de mi boca salió una frase, no sé si propia, escuchada en algún otro lado o sólo como fruto de la realidad que vivimos los jóvenes cuando salimos de la escuela, “los sueños son para los ricos”…. Como chicos clasemedieros, es difícil invertir en una empresa en la que tal vez sólo tengas una oportunidad para triunfar, y en la que si no la armas, habrás gastado todos tus ahorros y esfuerzos en vano, por eso es tan duro arriesgarse, por eso muchos tenemos miedo, debido a ello, muchos olvidan sus deseos, refugiándose en una familia, buscando realizarse a través de los hijos, no digo que esto sea un delito por dios, tener una familia es una de las mejores cosas que le puede suceder a alguien, pero cuando un hombre o mujer de familia se siente condenado a trabajar sin tregua, para darle un futuro a sus hijos, sin haberse realizado como persona, tomando el primer empleo aturdidor que encontró, la vida puede volverse bastante amarga.

¿Entonces que hacemos nosotros? ¿Nos rendimos ante la aplastante realidad? Llegaremos a ser unos adultos panzones, amargados, permitiremos que los mismos ojetes nos atoren mientras vemos el fut bol, nos quedaremos en la baba, sin saber que hacer cuando el gobierno tome una dependencia y haga lo que su chingada gana se le pegue con ella sin previo aviso, pagaremos todos los impuestos que se les ocurran, dejaremos que el planeta se eche a perder con la contaminación que causan nuestros autos, nuestra basura, por que estaremos enajenados y demasiado concentrados en resolver necesidades más urgentes e inmediatas como la papa, la escuela de los niños, el agua, el gas, la luz (que quien sabe cuanto vaya a costar ahora, vale madres), ¿en verdad lo permitiremos? ¿Quién de nosotros será capaz de hacer más allá de lo que le corresponde?

Total, aquella noche escribimos un blues, no voy a poner la letra ni nada, sólo invito a una reflexión no importa si se es joven o adulto, ¿cuál es la mejor manera de vivir para usted? ¿Sin anhelos y con la panza llena? ¿buscar realizarse, sin tener lo de la renta? ¡bueno! Ya que va a partirse uno el lomo, ¿por lo menos que sea en la búsqueda de la felicidad no?, si no la alcanzamos al menos lo habremos intentado, es aquí donde intervienen las sabias palabras de Henry Ford (millonario), “si crees que puedes lograrlo, o si no crees que puedes lograrlo, de todas maneras estas en lo cierto” entonces me pregunto, ¿de verdad? ¿de verdad existe una oportunidad para los jóvenes medianamente idealistas de la clase media? Quien sabe… pero si luchamos por ello, mínimo podremos morir satisfechos, al fin ¿pa´ que es la vida?